Mi experiencia sobre la radio tiene mucho que ver con mi necesidad de sentirme útil incluso cuando me han ninguneado y pisoteado mi propia credibilidad. Cuando miro atrás y veo los años que estuve con problemas espirituales (que, al menos en mi caso, lo eran, y de los gordos) mi expediente académico como estudiante universitaria cayó en picado. Pero miro atrás y sé que hice bien: aunque aparentemente solo sirva para acrecentar mi estigma (por mucho que sea con la voluntad de desestigmatizar), hice algo.
No solo hace sentir bien las cosas oficialmente reconocidas. Se pueden hacer mil cosas y esas pequeñas cosas, privadas, públicas o privadas de privacidad voluntariamente o no, son los bancos donde nos sentamos en el transcurrir de la vida, pero no para meditar (que también) sino para hacer alquímia (traer el cielo a la tierra).
Ese es el verdadero arte. Estamos aquí para eso. Ya sea pintando, cocinando, en algo más aparentemente creativo o en algo más aparentemente repetitivo (que también siguiendo a otros puedes y debes hacerlo desde tu huella personal, porque Dios solo ES a través de mí DE UNA DETERMINADA MANERA, ÚNICA, PERSONAL E INTRANSFERIBLE).
Lo que aprendí sobre la locura (y sigo aprendiendo) es que no estar loco es lo único que te puede volver loco. Porque el sentido común es el menos común de los sentidos y debemos ser fieles a lo que somos, a la integridad con nosotros mismos.
Y esto va para cuerdos y locos.
No solo hace sentir bien las cosas oficialmente reconocidas. Se pueden hacer mil cosas y esas pequeñas cosas, privadas, públicas o privadas de privacidad voluntariamente o no, son los bancos donde nos sentamos en el transcurrir de la vida, pero no para meditar (que también) sino para hacer alquímia (traer el cielo a la tierra).
Ese es el verdadero arte. Estamos aquí para eso. Ya sea pintando, cocinando, en algo más aparentemente creativo o en algo más aparentemente repetitivo (que también siguiendo a otros puedes y debes hacerlo desde tu huella personal, porque Dios solo ES a través de mí DE UNA DETERMINADA MANERA, ÚNICA, PERSONAL E INTRANSFERIBLE).
Lo que aprendí sobre la locura (y sigo aprendiendo) es que no estar loco es lo único que te puede volver loco. Porque el sentido común es el menos común de los sentidos y debemos ser fieles a lo que somos, a la integridad con nosotros mismos.
Y esto va para cuerdos y locos.