Perdonar pero sin olvidar, que puede volver a suceder lo que sucedió, pero dando una nueva oportunidad de recuperar la confianza perdida, y constatar e ir comprobando q el cambio se ha dado, o que no se volverá a dar aquella traición ... perdonar es complicado, porque duele la traición y aparece el miedo a ser dañados de nuevo, con lo cual, cuando robamos algo, en realidad robamos confianza en nosotros, robar o dañar de una u otra manera, es el daño que nos hacemos a nosotros mismos.
Puede que la persona que no perdona sea también igual de dura consigo misma, o puede darse casos de autoindulgencia pero ver vigas en ojos ajenos cuando están en los nuestros, pero en general me inclino a pensar que cada uno tiene su manera de juzgar en general, y que solemos tratar a los demás como a nosotros mismos, con lo cual, como la calidad, el perdón bien entendido empieza por uno mismo, porque sino, nos vamos de cabeza a los laberintos de la autodestrucción, destruyendo a nuestro paso todo cuanto tenemos cerca como hace hacer la enfermedad, quien está bien no juzga, ver defectos en los demás es reforzar los propios.
No hay comentarios:
Publicar un comentario