5.9.13

Lo que la mentira esconde

Lo que la mentira de los que me llaman loca esconden, es la realidad de que no lo estoy pese a que lo pretendan. Se creen más cuerdos que yo, y más hombres. Uno de ellos tirándome al el suelo (eso si, no me pegaron), sin dejar que me levantara de allí. Los hijos de mujeres que adoran a los hombres, maltratando a la parte de sí mismas de las que se llaman madre, impidiendo que la madre de verdad que estoy hecha gracias a todo eso evite que mi hija corra la misma suerte que yo, maltratada por mujer, todo bien en apariencia, era un juego por lo visto, y la que se había caído era yo. También era mentira que esconden y apartan de ella todo lo que viene de mí, algunos detalles aparte, por lo que se ve, y yo le echaba la culpa a la mujer que cuida de mi abuela, por no querer aceptar que mi madre se quiere tan poco a sí misma que no me sabe querer, y yo aprendiendo igualmente a amarme con la esperanza de poder educar a mi hija en un amor que yo sé que merece, en un trono que yo le doy, como princesa celeste de todo lo que sentí, fuera por la persona adecuada, o no, pero en todo caso fruto del poder de amor que aspiro a ser, y no del amor al poder que le pretenden inculcar al fruto de mis esfuerzos por ser más que ellos, no por superarles sino por trascender su sombra, mientras ellos pretenden que me crea que no les queda otra, y en todo caso rezando a diario por que la justicia divina descienda sobre la tierra, me libere de las falsas ataduras, y me deje educar a mi hija en un mundo libre y en paz.