Niño de mis versos tristes, eres profundo en tu acción, y no todo el mundo entiende, a tu humilde corazón.
Niño de mis corazones, espadas bastos y as. Eres como las espadas q no sé si vuelvo a alzar.
Pues cantas victorias muy pronto, sin saberme enamorar. En el fondo eres un tonto y me pones a otro mar.
Si tu gota no se une, a mi vasto caminar, tal vez acabe yo el cuento, en otro q no sea tu altar.
Las espadas donde toquen, y me canso ya de hablar. No te agrada ser mi muso pues quien sabe a quien cantar.
Porque eterno es el amor mientras dura, y a este paso ya ni empieza, mis queridos marcianitos, quiere tu ser de otra teta ?
Porque somos más q piensas, que queremos hasta anclar. Que aunque sea vasto y arduo eres berso de ultramar.
Sección donde sube la calor .. Es que no quieres tú ser llanto !! Tu te escondes en verdad, y quien sabe donde acabe nuestro mútuo caminar.