Me entraron en casa y me jodieron la tortilla. Tengo ganas de que se vean por fin las cámaras y saber quien o quienes son. Me atacan todas las noches. Tb hay quien me protege. El diablo pone en mi contra a todo el q puede de la gente cercana, y algun@s se dejan. Hay quien a veces, y hay quien por sistema. Cada quien cosechará lo q se siembre, el ladrón tendrá deudas, el karma es esa jodida tarjeta de crédito en la que disfrutas ahora, pagas luego. Y no se libra nadie. Pero nadie. Viva el salmo 35. Dios me bendiga a los q me bencide y maldiga a los q me maldicen, y haya justicia en la tierra. Padre nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu nombre. Venga a nosotros tu reino. Hágase tu voluntad, así en la tierra como en el cielo.
Me he comprado un libro de literatura erótica. Espero que no desaprezca de entre mis cosas, solo por comentarlo aquí. Tengo ganas de leerlo, pero tengo uno a medias de Deepak Chopra, y hasta q no me acabe uno no me empiezo el otro. Leí un trozo en la fnac y al final me lo compré.
Dicen tantas cosas. Cosas como que mi madre no se mercerá jamás el amor ni de mi padre ni mío. Cosas como que los delincuentes que me joden la vida me roban menos que mi propia familia, cuando entran en mi casa. Que no se merece a mi hija. Que ella paga por joderme, a la gente que entra a tocar mis cosas. Que el delincuente que tanto daño me hizo, o hace, nose, está enamorado de mí. Yo flipo. Cosas como que tengo un don. Se parece más a una maldición, a veces. Mi vida no es normal.
Me llaman loca por ser cuerda, me hacen gorda por saber comer. Creen tener razones para ir en mi contra por cosas como esa, pero como juzguemos seremos juzgados, y aunque a veces lo parezca, no se salvan pecadores por justos, ni pagan justos por pecadores. Hay un Dios. Y pondrá a cada cual donde se merece.
No hay comentarios:
Publicar un comentario