La paciencia es la madre de la ciencia, pero el arte también. Mediante la paciencia accedemos al mundo intuitivo de nuestro saber y asi, mediante el conocimiento de lo q somos, accedemos a la universalidad de las cosas y nos llega información procedente no solo de las estrellas, sino del universo. Las estrellas son la luz al final del camino, la esperanza en los momentos como el que estoy viviendo: sin mi hija, sin pareja, viviendo injusticias ataques de vudú, magia negra, violaciones, abusos, ataques a mí y a los míos por los que rezo a diario mientras mis lágrimas me acercan al cielo. Siendo cantante y habiéndome robado la vida la voz, siendo delgada y estando gorda, etc. Lejos de mi niña y con personas que se meten entre mi posible relación y yo, DETESTO a las personas que tratan de someter a los demás o no me dejan ser yo... pero el infinito es sabio, Dios solamente sabe el por qué de todo esto, y mi esperanza me dice (mi intuición de lo que es, a través de lo que soy) que la justicia existe y el cielo llegará a la tierra, hasta una aparente injusticia puede ser justa... quién sabe lo que yo hice en vidas pasadas, o si de verdad merezco todo esto? La luz de la esperanza solo brilla cuando sé que no solo rezo, sino que hago lo que puedo y a quien hace lo que puede no se le puede pedir más. Cuando sé que remo en la dirección correcta. Nuestros sueños solo son avalados si hay merecimiento y trabajo previo, si remamos en la dirección a lo que queremos ser, porque no somos otra persona ni cuando nos la hacen parecer, somos el fruto única y exclusivamente de nosotros mismos y así, el arte intuye que hay vacuna y la ciencia la encuentra ;)
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