En Sant Jordi siempre ha habido juegos florales porque es primavera. Florece encantada la tierra y empieza a vivir bajo el sol. Los habitantes del planeta, cada territorio a su ritmo, se sienten llamados a agitarse como el viento, que tantas lluvias trae en abril que se dice que aguas mil.
Y tanta gente lloraba pese a la alegría que reinaba, que las abejas se pusieron a cantarlo bajo el sol, puesto reina ella era, siempre en nuestro corazón.
Lo decían los oyentes, de esta gran desolación. Que tenía tanta pena que me da por decir no, y hasta eso me quitaron, quitaba el viento mi voz. Pero creo yo tenerla, puesto siempre el NO ES NO.
Y puesto eso rechazaron, para ellos no al no. Puesto que eso ellos me hicieron, se lo coman, pero no. No me quitas mis derechos puesto tengo yo razón, y en eso perdónenme ustedes, reitero el no es no.
No me quitas mis derechos, te lo pido por favor, puesto tengo yo una niña y la reclamo con amor. Para ser por siempre eterna en el cuento que al final, acabe por Dios como debe, y pueda florecer mi amor junto a ella, pero a tu lado (o no).
;))
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